El edificio del Círculo de Bellas Artes en Madrid, ha vuelto a convertir una de sus plantas en refugio climático lleno de vegetación y al que añadido hamacas, rincones de lectura y otros espacios de trabajo. Pero no es el único espacio libre de calor en la ciudad, el ayuntamiento ha habilitado también un refugio vegetal que es ideal para combatir esta ola de calor.