Una operación de la 59ª Brigada de Asalto de Ucrania muestra la vulnerabilidad de los helicópteros rusos frente a pequeños drones armados.
En la mañana del 29 de septiembre de 2025, un dron FPV de la 59ª Brigada de Asalto Separada de Ucrania derribó un helicóptero de transporte Mi-8 de las Fuerzas Armadas de Rusia. El ataque ocurrió cuando la aeronave volaba a baja altitud junto a un Ka-52, en un intento de evadir los sistemas de defensa aérea ucranianos.
La operación fue llevada a cabo por el 1º Batallón de Sistemas Aéreos no Tripulados “Depredadores de Altura”, con el apoyo de drones de reconocimiento que ajustaron la trayectoria del ataque.
Según canales rusos en Telegram, el helicóptero fue alcanzado y obligado a realizar un aterrizaje de emergencia, con los pilotos evacuados de la zona. La confirmación reforzó el impacto de la acción, ampliamente compartida en plataformas militares ucranianas y rusas.
El incidente evidencia la creciente eficacia de los drones FPV contra aeronaves de combate, especialmente a baja altitud. El control en primera persona permite a los operadores realizar maniobras precisas y dirigir ataques contra puntos vulnerables como motores y rotores.
Casos similares se han registrado en otros conflictos. En Myanmar, los rebeldes informaron haber utilizado drones para atacar un helicóptero Mi-17, reforzando la tendencia global del empleo de sistemas no tripulados contra activos aéreos.
Fuentes e imágenes: Telegram / kvbarmy | Telegram / ZOV_Voevoda