Guillermo Fernández Vara, expresidente de la Junta de Extremadura, falleció este domingo a los 66 años a causa de un cáncer de estómago. Su última aparición pública fue el pasado 13 de septiembre, durante la boda de su hijo en la basílica de Santa Eulalia de Mérida. En esa ocasión, muchos de los asistentes notaron un evidente deterioro físico del exmandatario, consecuencia de la enfermedad que le fue diagnosticada a principios de 2024 y por la que fue intervenido poco después.
Vara fue una figura clave en la política extremeña, presidiendo la Junta de Extremadura en dos etapas: de 2007 a 2011 y de 2015 a 2023. Su estilo moderado y su capacidad para alcanzar consensos le valieron el respeto de amplios sectores políticos y sociales. De hecho, muchos consideran que encarnó uno de los últimos perfiles de la política del acuerdo.
Este lunes, 6 de octubre, habría cumplido 67 años. Como muestra de respeto, la actual presidenta de la Junta, María Guardiola, ha decretado tres días de luto oficial en Extremadura. Durante este periodo, las banderas ondearán a media asta en todos los edificios públicos de la comunidad.