Jean Paul Gaultier ha vuelto a sorprender en la semana de la moda de Paris con un atrevido y provocador desfile donde vuelve a apostar por una moda sin géneros. Con mallas que simulaban desnudez masculina o los corsés icónicos de la firma pensados para ellos, rompiendo los roles de género.
En un ambiente industrial los modelos iban caminando rodeados de tuberías, con un juego de luces y destellos que los convertían en figuras fantasmagóricas y futuristas.