Pablo Laurta, acusado de asesinar a su ex pareja y a su ex suegra en Córdoba, y de secuestrar a su hijo, llegó a dar una conferencia en el Parlamento uruguayo meses antes del crimen.
En aquel momento, denunció a los organismos de violencia de género y se presentó como víctima, mientras preparaba el plan que derivó en una de las causas más estremecedoras de los últimos tiempos: el doble femicidio, el secuestro de su hijo y ahora la presunta ejecución del remisero Martín Sebastián Palacios, cuyo cuerpo apareció mutilado en Entre Ríos.